Ante la falta de temas sobre los que escribir debido a las vacaciones y a la escasez de cosas de importancia que quiera mencionar, me dispongo a comenzar con este apartado del blog referente a una de mis pasiones: el Carnaval de Cádiz.
Para esta primera entrada, he elegido a la que para mí ha sido la mejor agrupación en este año carnavalero.
Ésta agrupación, históricamente tiene el favor del público, ya que lleva concursando desde los inicios de la modalidad de comparsa allá por los 60. Por el contrario, no ha acabado de convencer nunca al jurado y no ha obtenido finales o premios como el seguidor cree que merecían. Me refiero a la Comparsa del Puerto de Santa María, los Majaras, que concursó este año con el nombre de Medio Siglo.
Medio Siglo de comparsas, un homenaje a su modalidad realizado de la mejor manera posible, haciendo en el popurrí un recorrido por toda la historia de la comparsa. Con músicas históricas mezcladas con letras nuevas. Haciendo que el aficionado recordase todo lo vivido.
Éste año, cuando sonaron por primera vez en la fase de preliminares, ya tenía yo en el bolsillo la entrada para verlos en cuartos de final.
Después de algunos años con más sombras que luces, yo esperaba una comparsa correcta, buena, pero sin llegar a ser una de las punteras.
Con los auriculares puestos, ante la imposibilidad de verlo en directo por televisión, me dispuse a escuchar a la mejor comparsa que ha sonado en los últimos años. Una musicalidad, una fuerza, unas voces… sonaba perfecto. La afinación era sublime, y el final de pasodoble, me enamoró.
Sin verlo, consiguieron ponerme los bellos de punta. Sonaba a grande, muy grande. No me creía que llegase a verlos en directo en el teatro.
Tuve la suerte, no sólo de verlos en cuartos, sino que en la final también los vi. Yo fui uno de esos muchos que cantó ¡Campeones, campeones! al acabar su repertorio.
Sin embargo, como siempre se quedaron a las puertas. Un segundo premio fue lo más que ese jurado les dio. Aun así, como pasa casi siempre, será la historia y el aficionado el que ponga a cada uno en su sitio. Y estos serán los que pongan a esta comparsa en lo más alto.Yo me limito a hacerles este pequeño homenaje, que es la única forma que tengo de demostrar que para mi pasan a la historia.
Confío que los aficionados al carnaval que pasen por aquí disfruten de lo que he escrito y estén más de acuerdo o menos, expresen su opinión. El Carnaval, como todo, no es una ciencia exacta y lo que para mí es blanco, para otro puede ser negro.
Como colofón, un extracto de su repertorio, para certificar todo lo expuesto con anterioridad.
Un abrazo
Tengo un Dios hace poco tiempo que ha nacido y dormidito esta a mi lado.
Mi hermano el pequeñito, ay a mi me ha curado.
El nació por la ciencia de sabios doctores, y acabaron con mis sinsabores, llegó a este mundo como un enviado y me ha regalado, me ha regalado, esa salud que el otro Dios del cielo no me habia dado.
No entiendo como tienen dudas y hasta se critique por la santa iglesia aquel que me trajo su ayuda y sea pecado el que naciera. Que ya no tomo medicinas, que ya con otros niños juego, que bajo el brazo trajo vida y nadie habrá que impida el quererlo.
Ea la nanita eah, cuando crezcas sabrás que tu hermano para siempre seguira a tu vera que se atreva nadie a hacerte daño.
Perdona Dios de las altura, tus curas me lo despreciaron.
Yo adoro al Dios que es pequeñito y está dormidito
AQUÍ A MI LADO.
No seré, no seré quien haga un pasodoble por esos muertos del terremoto.
Pero tampoco puedo, ay, ser ciego ni sordo.
No lo haré, por la sangre de los que se fueron. Ni amargar las noches de febrero con una letra de lagrimas vivas. Pero lo haría, pero lo haría para apoyar a los que en ese infierno salvaron la vida.
Aqui que tanto se aprovecha porque a veces un muerto vale muchos puntos. Aqui propongo menos coplas y hagamos algo todos juntos. Aqui que somos solidarios con una peña o con un manto unamonos porque hacen falta todas las gargantas contra el llanto.
Yo propongo una gran gala donde estemos to los que cantamos. De momento ya están los majaras y haber cuanto es lo que recaudamos.
Logremos que toas nuestras coplas le ayuden a un nuevo camino.
En vez de cantarle a los muertos gritemos con ellos:
¡HAITI ESTÁ VIVO!
